Mi marido dice que es una injusticia que se regale a las mamás parturientas y a los papás nada de nada. En mi caso, que no pude comer jamón durante el embarazo, recibí de unos amigos un jamón para chuparse los de dos que NOS COMIMOS LOS TRES (el peque por vía lactante, claro). El pobre jamon duró poco en casa... y a él le siguieron otros seis en los siguientes siete meses... pero eso es otra historia.
En este caso espero que el bebé también se haya puesto tibio de chuches!!
Contenía unas frutas italianas. Quien no las conozca, son gominolas riquísimas, indescriptibles. Hay que probarlas.
Un bote de Mashmallows blancos y rosas
El ya conocido bote de preparado de galletas.
Unas bolas de chocolate blanco
Y una latita de té de Harney & Son llamado "Mother's Bouquet" (muy apropiado).
Si estais interesados en estos regalos, no dudeis en preguntarme ¡¡mandamos a cualquier punto de España!!
4 comentarios:
¡Qué buena idea Ana!. Nico el grande, tiene razón. Aunque en mi caso, fué el papá de mi niña el que se comió los bombones de Belaria que me llevaron al hospital.
Besos desde Santiago
Bonita y original cesta de regalos, Ana. ¡ME ENCANTA!. Besos.
Qué bonito todo Ana! ...Me voy a ir contigo un par de días a verte trabajar!
Un abrazo.
Pilar
Jaja! es que el regalo del jamón es genial! yo ya se lo he regalado a varios parturientos y lo agradecen un montón! :) Aunque claro, estas chuches también son absolutamente ideales!!! :)
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